Buceo en Cuba
Texto y fotografías de Jamie Pollack, Shark Angels, a menos que se indique otra cosa
Cuba evoca todo tipo de ideas, como bailar salsa, ron, puros y coches antiguos pero, sobre todo, bellos y cristalinos arrecifes rebosantes de peces y tiburones. Tuve la oportunidad de bucear el pasado junio en Los Jardines de la Reina, una cadena de 250 islas vírgenes de coral situadas en la parte meridional de Cuba, y no me decepcionó lo más mínimo. Los Jardines de la Reina han sido declarados recientemente Parque Nacional. El acceso está restringido y limitado. La pesca comercial ha sido prohibida en todo el parque salvo en las zonas más externas. Y en 2016, Mission Blue y la Dra. Sylvia Earle, Embajadora Deep Elite de SCUBAPRO, lo declararon Hope Spot.
Fuimos como parte de un grupo educativo y asistimos a dos presentaciones sobre el conjunto biológico de arrecifes en el que íbamos a bucear, impartidas por Víctor, un biólogo de conservación cubano.
Salimos de Nueva York hacia Miami y a continuación tomamos otro vuelo directo hasta el aeropuerto de Santa Clara. Después tuvimos que hacer un viaje de cuatro horas en autobús hasta el barco desde el que realizaríamos las inmersiones durante una semana. A la mañana siguiente, viajamos durante otras cinco horas rumbo a Los Jardines de la Reina.
Nuestra embarcación era el Avalon II , que acogió cómodamente a nuestros 14 buceadores. El barco cuenta con 10 camarotes, cada uno de ellos con dos camas y baño privado. Además tiene una cubierta superior con jacuzzi y un divertido tobogán de agua en un lateral.
Nuestras inmersiones se realizaban desde dos lanchas amarradas a ambos lados del barco. Realizamos 4 inmersiones por día, incluidas dos inmersiones nocturnas. Cada inmersión duraba aproximadamente una hora.
El primer día de buceo estuvo bien, con exuberantes corales, bancos de peces y cálidas aguas. Pero cuando nos desplazamos con el barco mar adentro, la intensidad de las inmersiones aumentó de forma drástica. Buceábamos junto a animales de mayor tamaño y disfrutábamos de una topografía más interesante.
Los bancos de tarpones aparecían en los salientes y bajo las cornisas, con lo que se creaban imágenes verdaderamente impresionantes.
Como la pesca submarina no está permitida, los meros no temen a los buceadores, por lo que era habitual tener enormes meros haciéndonos compañía en casi todas las inmersiones. Son excelentes modelos fotográficos y, por supuesto, resultaba muy divertido admirar las «estaciones de limpieza de meros». ¡Es como una clínica dental para peces!
Pero cualquiera que me conozca realmente sabrá que la verdadera razón por la que estaba allí era para ver tiburones. ¡Y vimos tiburones! En casi cada inmersión éramos saludados por tiburones grises y tiburones de arrecife del Caribe. Les gustaba merodear justo por debajo del barco, ¡así que no me importaba nada hacer las paradas de seguridad!
En todas estas inmersiones podían contemplarse numerosos tiburones de gran belleza. La variedad de especies que pudimos ver fue inmensa. Bucear con tiburones es siempre una experiencia hermosa y divertida.
La temperatura del agua era cálida y agradable, en torno a 28 grados centígrados. Iba muy cómoda con mi Everflex de 3 mm con chaleco y capucha. Suelo enfriarme fácilmente y me gusta mantener el pelo apartado de la cara cuando hago fotos, por lo que este es mi traje de buceo preferido. Llevaba mis aletas GO con calcetín, que me encantan para cualquier situación de buceo. Son ligeras y pequeñas, con potencia suficiente para cualquier contratiempo. Además llevo el chaleco hidrostático Hydros Pro con ordenadores de buceo G2 y Luna (siempre buceo con dos ordenadores, ¡especialmente cuando viajo!). Y, por último, mi máscara favorita, la Spectra mini.
Recomiendo de veras bucear en los arrecifes de Cuba si se tiene la oportunidad. Hay mucho que ver y explorar, ¡tanto en el agua como en la isla!
El último día visitamos la ciudad de Santa Clara antes de marcharnos definitivamente para tomar nuestro vuelo, y tuvimos ocasión de pasear por allí durante una media hora. Me pareció muy interesante descubrir la cultura y el entorno de este hermoso lugar.
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